Xalapa es un municipio perteneciente al estado de Veracruz, México; uno de sus aspectos que más llaman la atención de los turistas y de sus mismos pobladores, es la riqueza en cultura de estas tierras, y las historias que corren de boca en boca en las calles xalapeñas. ¡Anímate a conocerlas todas!
Leyendas de Xalapa cortas
En Xalapa podemos encontrar muchos relatos cortos con los que te puedes entretener con tus amigos, sea para pasar el rato en solitario o bien puedes compartirlas con amigos y disfrutar de los increíbles sucesos ocurridos en Xalapa a través de su historia.
Entérate de algunas de las leyendas más populares de Xalapa, Veracruz más adelante. ¡Continúa leyendo!
La mujer de los taxis
Esta leyenda se sitúa en la zona citadina de Xalapa, donde hay abundantes taxis transportando a las personas a sus destinos, muchas personas recuerdan la historia de esta misteriosa mujer que se subía a los taxis y siempre tomaba el mismo destino de ida y venida, lo que extrañaba a los conductores.
La leyenda se basa en un taxista común y corriente que buscaba pasajeros para llevar, le tocó hacer una larga carrera a un hombre, que pasaba por el Panteón Palo Verde de ida y venida, ya que tenía que devolverse a buscar más clientes en su zona.
Esa misma noche, cuando venía pasando por al lado del panteón, una mujer le silbó para que la llevara a algún lado y como de costumbre se detuvo para recogerla.
Luego de un rato de largo silencio, el conductor quiso romper el hielo preguntándole a la mujer la razón de su salida a altas horas de la noche, a lo que respondió con silencio, más tarde le comentó que hacía frío, que donde había dejado su abrigo, aconsejándola para que no se enferme, a lo que respondió simplemente “Estaba charlando con unos amigos y se me hizo tarde”.
La parada misteriosa
La mujer le dijo al taxista que se detuviera en una parada poco inusual, se bajó rápidamente y le pidió al conductor que la esperase un momento. A poco rato regresó más calmada y pidió que la regresara al lugar donde la había encontrado, y muy amable el taxista procedió a devolverla a su lugar. Al bajarse le dijo al chofer que no tenía dinero en el momento, y que le cobrara a su esposo en su casa. Le dio la tarjeta, y sin nada más que decir el conductor se fue.
Al siguiente día el taxista fue a cobrarle al esposo en la mañana, quien se puso algo triste cuando el taxista mencionó el nombre de la mujer, ya que resulta que esta había muerto hace años atrás; también le aclaró que no es el primer taxista que viene, y que posiblemente al fantasma de su esposa solo le quede molestar taxistas en las noches.
El Encanto
Esta es la historia de un joven que andaba por el cerro de Macuiltépetl, cuando de repente se encontró con una misteriosa puerta que le provocó gran curiosidad de inmediato, por lo que fue a ver a donde llevaba.
Cuando atravesó esta puerta salida de la nada, se encontró con una gran ciudad que albergaba una numerosa población, y muchos de los que él conocía se encontraban allí, solo había un pequeño detalle; en la vida real todos ya habían fallecido.
El joven pasó un rato agradable con sus amigos ya fallecidos hasta que decidió irse, buscó la puerta de nuevo, y al pasar por ella otra vez pensó que salió de una cueva, pero no le prestó mucha atención y se fue a casa.
Al llegar a su hogar el joven le dio una gran sorpresa a su familia, ya que lo vieron con una gran barba y el cabello muy largo, sus ropas viejas y desgastadas. El muchacho no se había dado cuenta de este detalle, pero no fue lo más impactante de esa noche, pues después sus familiares dijeron no haberlo visto por un año entero, y terminó de impactar al muchacho que solo pasó un rato en el cerro.
Se dice que si te pasas mucho por este lugar puedes encontrar alguna puerta que te lleve al mundo de los muertos, pero si no encuentras la salida en poco tiempo, podrías pasar atrapado en ese mundo muchos años.
La mujer sin rostro
Hace muchos años en Techacapan existían unos viejos fregaderos donde las mujeres iban a lavar su ropa en la tarde, eran muy populares para todo el pueblo, ya que de 2 a 5 de la tarde se encontraba lleno y no había espacio para tantas personas.
En ese tiempo había una ley que impedía a las personas estar en las calles luego del anochecer, ya que se rumoraba la aparición de una extraña mujer que espantaba a las personas. Los serenos se encargaban de dar la advertencia a las personas que anduvieran en las calles a horas de la noche.
Hubo un atardecer en el que un sereno estaba patrullando como de costumbre, cuando pasa por la lavandería y observa a la presencia de una mujer dentro, se veía algo desesperada. Tranquilamente se le acerca y le advierte que ya va siendo hora de entrar a su casa, al parecer estas palabras apuraron aún más a la dama, por lo que tomó sus cosas y se fue de inmediato.
La mujer del último lavadero
Luego el sereno ve más allá una silueta en los fregaderos del final, y decide decirle desde lejos la misma advertencia, aunque esta hiciera caso omiso. Luego de ver que la dama no respondiera a sus advertencias, decidió acercársele y tomarla por el hombro para repetirle, y cuando voltea se da cuenta de que no tiene rostro y le grita desgarradoramente en el rostro.
El sereno logró escapar para contar la historia, se dice que este quedó traumado de por vida por lo que renunció y nunca pudo olvidar este aterrador momento. ¡Cuéntasela a tus amigos!
Esperamos que te haya gustado el artículo, si es así no olvides valorar la página más adelante, ya que nos importa lo que opines de nuestro sitio. Además puedes compartir la información con tus amigos para así llegar a muchas más personas con tu ayuda.
¡Por cierto! Antes de que te vayas, queremos recomendarte esto que seguro que te interesa:
- Leyendas de lobos
- Leyendas Griegas
- Leyendas de Sonora
- Leyendas Aztecas
- Leyendas breves
- Leyendas etiológicas
- Leyendas de París
- Leyendas de Saltillo
- Leyendas de Quidea
Son una serie de contenidos a parte del que has leído que puede ser interesante para tí ¡Muchas gracias por leernos!